José María Castañeda .-

El número de muertes entre adolescentes continúa en aumento debido a imprudencias al conducir, muchas veces motivadas por desafíos a la muerte y la falta de precaución al volante.

Esta vez, la víctima fue Jesús Mario García Valdés, quien perdió la vida tras impactar su motocicleta Italika 200 cc contra una camioneta estacionada a un costado de la carretera Santiago–Paredones, justo frente a unas tierras de cultivo. El fuerte impacto le provocó heridas fatales.

Pese a la pronta llegada de una ambulancia de la Benemérita Cruz Roja, los paramédicos no pudieron hacer nada para salvarle la vida y solo esperaron la llegada del personal de la Fiscalía para dar fe del fallecimiento y realizar el levantamiento del cuerpo, que fue trasladado al Servicio Médico Forense (SEMEFO).

Un jornalero que se encontraba reforzando unos cercos —y cuya identidad se reserva— relató que Jesús Mario había pasado por el lugar a exceso de velocidad al menos tres veces antes del accidente. Según el testigo, el joven perdió el control de su motocicleta e impactó la parte trasera de una camioneta tipo pick-up, que regularmente es estacionada en la cuneta por su propietario para acceder a pie a sus tierras cruzando un canal cercano.

Una vez más, una vida joven se pierde de forma trágica e innecesaria. Lamentablemente, no pasa una semana sin que se reporten accidentes mortales por la falta de conciencia y precaución al conducir, especialmente entre adolescentes, mientras que la responsabilidad de orientar y educar recae también en los padres y tutores.