Por Oscar Verdín Camacho
Los operativos para la localización de quienes manejan en estado de ebriedad deberían ser constantes, no únicamente en fines de semana y por la noche.
Una situación similar aplicaría respecto a las personas que conducen motocicletas sin casco y en igual situación sus acompañantes, no pocas veces niños pequeños.
Y a ello habrá que añadir posiblemente la más alta problemática, referente al uso del celular mientras se conduce un vehículo, sea carro o motocicleta.
Es decir, se requiere una importante participación de los agentes de vialidad para detectar estos abusos de conductores que, lamentablemente, muchas veces ocasionan graves accidentes.
Y es que no debe haber pretexto. Resulta imposible que tales situaciones que están a la vista de todos, no sean ubicadas por los elementos de seguridad, de cualquier dependencia.
No son pocas las personas que han resultado lesionadas o incluso han perdido la vida por el mal manejo a causa de estas distracciones e irresponsabilidades.